jueves, 13 de mayo de 2021

sencillas son

 




Se sabe que la vejez, que a menudo olvida una parte sustancial de la vida transcurrida, recuerda la infancia con una claridad cada vez mayor. Y, dado que se ha dicho que solo a través de la infancia se accede al reino de los cielos, parece justo desprenderse de cualquier otro bien a cambio de esa sola posesión. Una posesión que tal vez se alcanzará con la muerte. 

   El viejo más disperso se reviste del secreto de un augur cuando comienza a narrar su niñez. La vida ralentizará su ritmo a su alrededor, extraños silencios lo envolverán y ni el niño más inquieto podrá resistírsele. Parecerá dotado, en esos instantes, de poder augural. De hecho, le está señalando al niño una meta: no ya su propio pasado, sino su futuro, el futuro de su memoria de adulto. Ni el uno ni el otro lo saben, si no es por la cualidad numinosa de las palabras, que envuelve tanto al uno como al otro en la misma fascinación. Qué sencillas son esas palabras. 







de 'In medio coeli' (fragmento)

en "Los imperdonables"

Cristina Campo

trad. María Ángeles Cabré

ed. Siruela (2020)


No hay comentarios:

Publicar un comentario