Los filósofos dan testimonio de estas tres operaciones: el agua protege al feto tres meses en la matriz; el aire lo alimenta durante los tres meses siguientes, y el fuego lo guarda en los últimos tres meses. El niño no verá el día si estos meses no han transcurrido; sólo entonces nace y el sol le alimenta, él que revive todo lo muerto.
fragmento de "Aurora Consurgens"
atribuida a Tomás de Aquino
trad. Núria García i Amat
ed. Indigo (1997)
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