El mundo que conocemos no es el único que ha creado Dios.
Dios construye continuamente otros mundos
que continuamente va destruyendo:
no le proporcionan ninguna alegría.
sentencia midrásica, en 'Adán o el misterio del principio'
de "Celebración Bíblica"
Elie Wiesel
trad. Magdalena Guilló
ed. Milá / Editor (1988)
No hay comentarios:
Publicar un comentario