*
necesito palabras, todo tipo de palabras, nombres, los nombres de los pelajes de burros y caballos, yuyos, cardones, flores silvestres, enredaderas de campánulas purpúreas en tres gradientes de color, frutos rastreros aromáticos, declives, accidentes geográficos, quebradas, volúmenes, cuerpos geométricos, nombres propios de los cerros, de abejorros, de la mariposa del gusano del choclo que luce alas blancas cuatrifolias y cubre por tan solo un día toda la ladera de cursos y remansos volátiles y todo un día y una noche después la luna flotaba redonda detrás del cordón oscuro y unas nubes habían quedado enredadas en algunas de las cumbres y se desmadejaban para allá por donde el cerro baja también hoy a la mañana cuando bajaba la calle yendo como para la escuela donde me presenté pasadas las diez de la mañana y dije - permiso, buen día, yo soy el cuentacuentos. no les avisaron ?- y la dire con el rostro radiante me recibió y fui convidado como cualquier peregrino con mate dulce y pan de grasa salimos con sillas de madera debajo de los pinos y había un montón de niñas y niños de todo tamaño de sonrisa y candidez sentados en círculo en las sillas rojas y de otro color porque se habían acabado para empezar el cuento que se llama el lugar que nadie conoce y que nadie conocía tal vez porque es ruso donde aparecen yuri el arquero, la mujer alondra, el zar, su visir, el chancho svinka, la bruja baba-yaga y el misterioso shvat-bazum que vivía en la caverna del abismo y todos corren grandes aventuras y los niños no cabían en sí de entusiasmo y después bajaron la bandera nueva que ondeaba al viento bajo el cielo límpido emocionado me despidieron y estaba por irme pero un chico se demoró antes de entrar al comedor y me preguntó cómo hacía la bruja deformé la voz y se fue para adentro riendo de puro gusto y yo volví sobre mis pasos subiendo la cuesta y esa misma tarde en cuclillas sobre una gran piedra granítica a la sombra me puse a escribir cuando encontré un pequeño saltamontes sumamente curioso que encaró con sus antenas derecho a investigar qué clase de criatura desmesurada era yo que lo observaba con una cierta cuota de respeto mientras veía sus ancas elásticas de anfibio y su espalda listada con franjas de turquesa salamandrino comprobando ante su embate que no lo asustaba mi tamaño en lo más mínimo porque ese es su mundo, un paraíso para el botánico, el ornitólogo, el entomólogo, el mineralológo, o en fin para cualquier aficionado en cuanto a fractales naturales se refiere de toda escala y condición ...
chacras, traslasierra, córdoba viernes 17 de marzo 2006
imagen: manada de caballos, arte rupestre
grabado mural en Font-de-Gaume, Dordogne.
No hay comentarios:
Publicar un comentario