En efecto, respecto a la deficiencia de los eones, ésta es la deficiencia: cuando la desobediencia y la locura de la Madre se hizo visible al faltar la orden de la majestad del Padre, ella quiso suscitar eones. Y cuando ella habló, emergió el Arrogante (authádes). Y cuando dejó una porción (méros), el Arrogante se apoderó de ella y resultó la deficiencia. Esta es la deficiencia de los eones. Cuando el arrogante tomó la porción, la sembró y puso sobre ella poderes y autoridades (exousíai). Y él la confinó entre los eones mortales. Y se alegraron todos los poderes del mundo de haber sido engendrados.
'Primera respuesta de Jesús' (fragmento)
de la "Carta de Pedro a Felipe"
en "Textos Gnósticos - Biblioteca de Nag Hammadi II"
A. Piñero, J. Montserrat Torrents, F. García Bazán
ed. Trotta (1999)
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