«Oh Abuelo Wakan-Tanka, ésta es tu hierba misteriosa, que pongo en el fuego; su humo se extenderá por todo el mundo y llegará incluso hasta el cielo; los pueblos cuadrúpedos y los alados y todas las cosas sabrán qué es este humo y se alegrarán. ¡Que esta ofrenda ayude a establecer un parentesco entre todas las cosas, todos los seres y nosotros! Que todos ellos nos den sus poderes para que podamos soportar los sufrimientos que nos esperan. Mira, oh Wakan-Tanka, pongo esta hierba aromática en el fuego y el humo se elevará hacia Ti.»
Alce Negro/J.E. Brown
en "La pipa sagrada - Ritos Sioux"
trad. Esteve Serra
ed. Taurus (1980)
No hay comentarios:
Publicar un comentario