lunes, 31 de agosto de 2015

plato








   Comiendo una vez a la mesa de un gran señor cierto truhán, viendo que le pusieron delante un plato de pescado frito muy menudo, y que al señor le dieron otro de más gordo y mejor, tomaba el pescado en las manos y poníaselo al oído. Tantas veces lo hizo que el señor le dijo:
   –¿Qué significa eso, di?
   Respondió:
   –Sepa vuestra señoría que mi padre fue pescador, y murió en el mar, y, por saber qué años habrá que murió, estoylo preguntando a estos peces, y respóndenme al oído que, por ser mozos, no se acuerdan de ello, pero que lo pregunte a esos mayores, que ellos me lo sabrán decir.
   Respondió el señor:
   –¿Así? Pues razón es que pases a mi plato, porque te informes mejor.














"Preguntando al pez"
en "Cuentos folklóricos españoles del siglo de oro"
comp. Maxime Chevalier
ed. Crítica (1983)


domingo, 30 de agosto de 2015

palabras










   «Las palabras llevan a las acciones. Preparan el alma, la alistan y la mueven a la ternura».

























Santa Teresa de Ávila (1515-1582)
citada por Raymond Carver
en "La vida de mi padre"
ed. Norma (1995)

sábado, 29 de agosto de 2015

medianoche










¿Cuál es su trabajo, obreros nocturnos?

¿Qué brecha nos muestran?









a la luz de los fanales

con asombro y alegría

 un lugar en medianoche

un jardín donde no había


















Ricardo Messina 
 inédito (1986)




viernes, 28 de agosto de 2015

debate










   Yo te conozco, ¡oh monstruo! Henos de nuevo frente a frente. Reanudamos aquel largo debate en donde lo dejamos.






















Saint-John Perse (1887-1975)
fragmento de "Exilio"
en "Antología poética"
trad. Jorge Zalamea
ed. Fabril (1960)


jueves, 27 de agosto de 2015

nuestras flores







¿Quién me tomará? ¿Quién irá conmigo?
Aquí estoy en pie, amigos míos.
yo soy un cantor, desde el fondo del pecho
mis flores y mis cantos desgrano ante los hombres.
Una gran piedra tajo, grueso madero pinto:
en ellos pongo un canto.
Se hablará de eso un día, cuando yo me haya ido,
del modelo de cantos que dejo en la tierra.
Allí vivirá mi corazón, allí vendrá de la región de niebla
mi recuerdo y vivirá mi nombre.
Lloro cuando digo y hablo con mi corazón:
¡Si viera yo la fuente de donde el canto brota,
y pudiera trasplantarla a la tierra y se criara!
Allí vivirá mi corazón, allí vendrá de la región de niebla
mi recuerdo y vivirá mi nombre.
La flor de los príncipes exhala fragante aroma,
se están uniendo en uno nuestras flores.
Ya se oye, ya germina mi canto:
está retoñando mi trasplante de palabras.
Se yerguen nuestras flores en tiempo de lluvia
y la flor de cacao fragante se va abriendo,
exhala aroma y caen en lluvia enervadoras flores.
Ya se oye, ya germina mi canto:
está retoñando mi trasplante de palabras.
Se yerguen nuestras flores en tiempo de lluvia.















poema náhuatl citado en
"Muerte a filo de obsidiana"
Eduardo Matos Moctezuma
ed. Fondo de Cultura Económica (2000)


miércoles, 26 de agosto de 2015

el balaur








   Según algunos, el balaur tiene cuerpo de serpiente, grandes alas y patas con corvas garras; según otros, no tiene patas, pero sus dientes son venenosos; unos afirman que habla como los hombres; otros, que sólo ruge y arroja fuego por la boca y que por donde pasa no vuelve a crecer la hierba. Unos dicen que tiene siete cabezas; otros, que doce, y que cuando va a la lucha vuela y anda a la vez y abre la boca tanto, que avanza «con una mandíbula tocando el cielo y con la otra la tierra», abrasándolo todo. Unos dicen que habita en lugares desiertos y abandonados, entre ruinas de casas; otros, que bajo el agua, y que cuando tiene hambre, engulle al hombre que se acerca a la orilla. 
   Para «hacer» un balaur se juntan muchas serpientes en un lugar húmedo, frondoso y solitario, y allí, todas a la vez, comienzan a soplar hasta que les sale espuma de la boca. Esa espuma, después de recibir mucho tiempo el aliento, se endurece y transforma en un diamante que tiene el poder de calmar la sed y el hambre de quien lo lame. Si una serpiente se traga ese diamante, se vuelve más gruesa y larga y le crece la cabeza; si se esconde entonces y durante siete años sin interrupción vive en la oscuridad sin que nadie la vea, sale convertida en balaur.
















adaptado de "Cuentos y leyendas de Rumania"
Angela Ionescu
ed. Norma (1989)


martes, 25 de agosto de 2015

conejos







   Mandaron a un estudiante, yendo a cazar, que no hablase, porque espantaría a los conejos. Y dijo cuando los vio:
   –Ecce coniculi multi.
   Y como se espantasen y le riñesen, respondió:
   –¿Quién había de pensar que los conejos sabían latín?















'El estudiante tonto'
en "Cuentos folklóricos españoles del siglo de oro"
comp. Maxime Chevalier
ed. Crítica (1983)


lunes, 24 de agosto de 2015

sonora XIV










   Me llamabas la atención sobre un fenómeno de relieve acústico donde cada hoja de árboles y arbustos  refractaba el sonido del motor puenteado fragmentándolo en un eco multiplicado que cambiaba de acuerdo a nuestra posición en la noche helada del lunes a poco de la primer nevada: imaginé un instrumento análogo capaz de recrear ese efecto compuesto por un armazón de maderas plegables que sostendrían cantidad de cuerdas transversales donde colgarían pequeños rectángulos de papel de seda o calco: estandartes en miniatura ubicados en un gradiente aleatorio de planos que a su vez vibrarían en resonancia con la fuente a la que fuesen expuestos creando un mosaico sonoro facetado.


















Ricardo Messina
fragmento de correspondencia 
con Juan S. en Septiembre 2007.


domingo, 23 de agosto de 2015

el vaso







   «Badurnn era el nombre de un rey. Su mujer fue a la fuente y allí vio a dos mujeres de los sidhe. Había una cadena de bronce entre ellas. Cuando la vieron, las mujeres del sidhe fueron bajo la fuente. Ella las siguió bajo la fuente y vio una verdad maravillosa en el sidh: un vaso de cristal. Si un hombre decía sobre él tres palabras falsas, se rompía en tres en su mano. Si un hombre decía tres palabras verídicas, los pedazos volvían a reunirse de nuevo. La mujer de Badurnn pidió entonces aquel vaso a las gentes del sidh. El vaso le fue entregado y desde entonces distinguió lo verdadero de lo falso en casa de Badurnn».



















"El vaso de Badurnn"
en "Los Druidas"
Christian J. Guyonvarc'h y Françoise Le Roux
trad. Juan Manuel Ortiz y José Luis Sánchez-Silva
ed. Abada (2009)


sábado, 22 de agosto de 2015

compromiso






   Una mañana, cuando aún ni los pájaros estaban en movimiento, el rey sintió que su amada compañera se estaba levantando. Miró con un ojo la luz que penetraba a través de la ventana, y reconoció que en justicia no debería ser llamada luz. 
   –Ni siquiera han salido los pájaros –murmuró.
   Y luego se dirigió a Becfola:
   –¿Por qué os levantais tan temprano, mi corazón?
   –Tengo un compromiso –respondió ella. 
   –Esta no es hora para compromisos –dijo el rey con calma.
   –Así debe ser –respondió ella, y se vistió con rapidez. 

   –¿Y cuál es ese compromiso? –insistió él.
   –Un vestido que he dejado en cierto lugar y que ahora debo tener. Ocho fruncidos de seda bordados en oro, ocho preciosos broches de oro batido, tres diademas de oro puro.
   –A esta hora –dijo el paciente rey– la cama es mejor que el camino.
   –Así debe ser –dijo ella.
  –Y además –continuó él– un viaje en domingo trae mala suerte.
   –La suerte será lo que deba ser.
  –Mantener un gato alejado de los ratones o una mujer de sus vestidos no es tarea del rey –dijo el monarca con severidad.















fragmento de "Los galanteos de Becfola"
en "Cuentos de hadas irlandeses"
trad. Jorge A. Sánchez
ed. Obelisco (1985)





viernes, 21 de agosto de 2015

niñita







   Erase una vez una mujer que deseaba tener un niño pequeñito, pero no sabía de dónde sacarlo; así es que fue a ver a una vieja bruja y le dijo:
   –Cuánto me gustaría tener un niño pequeñito, ¿puedes decirme dónde encontrar uno?
   –Eso está hecho –dijo la bruja–. Aquí tienes un grano de cebada que no es de esos que crecen en los sembrados o se comen las gallinas. ¡Plántalo en un tiesto y ya verás!
   –¡Muchas gracias! –dijo la mujer y le dio a la bruja doce cuartos, volvió a casa, plantó el grano de cebada y al instante creció de él una flor grande y preciosa, muy parecida al tulipán, pero con los pétalos cerrados, como si todavía fuese un capullo. 
   –¡Preciosa flor! –dijo la mujer y besó los pétalos rojos y amarillos, pero al momento de besarla dio la flor un fuerte estallido y se abrió. Era un tulipán auténtico, no cabía duda, pero en medio de la flor, sentada en los verdes estambres, había una niñita, muy delicada y graciosa, no más alta que una pulgada, por lo que la llamaron Pulgarcita.

















Hans Christian Andersen (1835-1872)
fragmento de "Pulgarcita"
en "La reina de las nieves y otros cuentos"
trad. Alberto Adell
ed. Alianza (1989)



jueves, 20 de agosto de 2015

edad








   Amadís se levantó y volvió a poner la silla en su lugar. En la arena amarilla era fácil hacer que se mantuviera derecha. 
   –Está limpia esta arena –dijo Amadís–. Me gusta mucho este lugar. ¿Nunca sopla viento?
   –Nunca –le aseguró Atanágoras–. Si bajamos a lo largo de esa duna encontraremos el restaurante.
   Largas hierbas verdes, rígidas y enceradas, manchaban el suelo con sombras filiformes. Los pies de los dos caminantes no hacían ruido alguno y dejaban huellas cónicas de contornos suavemente redondeados.
   –Aquí me siento otro hombre –dio Amadís–. El aire es muy sano. 
   –No hay aire –replicó Atanágoras.
   –Eso simplifica todo. Antes de venir aquí tenía momentos de timidez.
   –Parece haberle pasado eso. ¿Qué edad tiene usted?
   –No puedo darle la cifra. No recuerdo el comienzo. Lo único que podría hacer es repetirle algo que me dijeron y de lo que no estoy seguro. Prefiero no decirlo. En todo caso, soy todavía joven. 
   –Yo le daría veintiocho años.
   –Se lo agradezco. No sabría qué hacer con ellos. Usted encontrará seguramente alguien a quien le agradarían.

















Boris Vian (1920-1959)
fragmento de "El otoño en Pekín"
trad. Luis Echávarri
ed. Losada (1969)


miércoles, 19 de agosto de 2015

ninfas







   Las ninfas náyades son las almas que van hacia la generación. Por lo cual también se usa llamar ninfas a las desposadas, dado que se han juntado para generar, y se usa también bañarlas con aguas lustrales tomadas de fuentes, arroyos y manantiales que siempre fluyen. Para las almas iniciadas en la naturaleza y para los dáimones patrones de los nacimientos el cosmos es sagrado y agradable, aun siendo oscuro y brumoso por naturaleza. Por esto es que se sospechó que ellas eran aéreas y que tomaban su esencia del aire. Por eso el lugar sagrado sobre la tierra que resulta adecuado a ellas bien podría ser "una agradable gruta brumosa", imagen del cosmos en el cual las almas residen, como en el mayor templo concebible. La gruta es apropiada para las ninfas patronas del agua, ya que en ella hay "aguas que siempre fluyen".

















Porfirio (234-305 d.C.)
"El antro de las ninfas en la Odisea"
trad. Pablo Maurette
ed. Losada (2008)


martes, 18 de agosto de 2015

leve











de piedra descalzo en piedra


llueve leve pierdo el sol


recupero en vellones de semilla






















Ricardo Messina
de la 'Suite Serrana'
(Serie inédita)


lunes, 17 de agosto de 2015

los tres granos







   Hubo cierta vez un muchacho que se llamaba Yurguis. Había hecho tratos con un terrateniente para trabajar de mozo en su finca por espacio de un año.
   –¿Qué sueldo quieres? –le preguntó el señor.
   –Lo que me caiga dentro de la oreja durante el año –replicó el chiquillo.
   El terrateniente accedió. 
   Yurguis trabajó todo el año. Pero tan sólo le habían caído tres granos de cereales en la oreja. Una vez transportaba trigo y se le metió un grano en la oreja; otra vez fue un grano de centeno; la tercera uno de avena. Yurguis envolvió los tres granos en un papel, se despidió de su amo y se fue a buscar mejor suerte. 
   Anduvo durante todo el día. Al anochecer entró en una casa y pidió que le permitieran pernoctar. Como el dueño de la casa consintiera, el muchacho le entregó los tres granos envueltos y le dijo:
   –Le ruego que guarde bien esto; es el sueldo de un año de trabajo.
   El dueño de la casa se llevó el paquetito para guardarlo, pero tuvo curiosidad por saber en qué consistía el sueldo de un año de trabajo. Al ir a desenvolver el paquetito, los granos rodaron por el suelo y, en un abrir y cerrar de ojos, se los comió un gallo...
   A la mañana siguiente, al levantarse, el muchacho se preparó para reanudar la marcha y pidió al dueño de la casa que le devolviera el paquetito.
   –Perdóname, muchacho. Anoche, no pudiendo contener mi curiosidad, desenvolví el paquetito. Cayeron unos granos y el gallo se los comió –replicó el dueño.
   –No, no puedo perdonarte. Era el sueldo de un año de trabajo. Si un gallo se ha comido esos granos, tienes que darme el gallo.




















fragmento de 'Los tres granos de cereales'
en "Cuentos Populares Lituanos"
trad. Laura Andresco
ed. Espasa-Calpe (1965)


domingo, 16 de agosto de 2015

espectro







   El señor Hanor, ilustre profesor y bibliotecario de Dantzig, combatió, con todas las ventajas que la verdad proporciona, las supersticiones y los prejuicios de la gran mayoría de antiguos y modernos con respecto al retorno de las almas y de las apariciones; pese a lo cual cuenta, muy grave, la fabulosa aventura que, según él, le ocurrió a un muchacho llamado Flaxbinder.
   Este muchacho, cuya disolución y cuyo apego al vicio eran sus únicas ocupaciones, hallábase una noche fuera de su casa. Su madre entró en su dormitorio y se encontró con un espectro que se parecía en grado sumo a Flaxbinder, tanto por el rostro como por la figura; lo tomó, pues, por su hijo. Estaba el espectro sentado ante un escritorio literalmente cubierto de libros y parecía profundamente ocupado en leerlos y meditarlos.
   La buena madre, convencida de que veía a su hijo y agradablemente sorprendida, dejó libre paso a la alegría que aquél súbito cambio le daba, cuando, de pronto, oyó en la calle la voz del mismo Flaxbinder  que tenía ante sus ojos. Primero se asustó sobremanera, pero luego, viendo que aquél que oficiaba de hijo suyo no hablaba y tenía un aspecto sombrío, taciturno, y huraña la mirada, dedujo que debía ser un espectro. Deducción tal redobló su terror, y corrió a abrirle la puerta al verdadero Flaxbinder.
   El joven, que regresaba de una francachela, entra bulliciosamente en su cuarto, ve el fantasma..., se aproxima... y el espíritu no se inmuta. Flaxbinder, petrificado ante el espectáculo, rápidamente concibe la resolución de apartarse del vicio, de renunciar a sus desarreglos y de entregarse al estudio: termina prometiendo que imitará al fantasma.
   Apenas hubo concebido tan loable proyecto, el espectro sonrió de un modo horrible, arrojó los libros y echó a volar. Pero Flaxbinder mantuvo su palabra y se enderezó.















Charles Nodier (1770-1844)
'Flaxbinder corregido por un espectro'
en "Infernaliana"
trad. Hugo Acevedo
ed. Brújula (1968)


sábado, 15 de agosto de 2015

el monte Taiqi







   A ciento ochenta li más hacia el oeste está el monte Taiqi. Nace allí el río Guan, que fluye hacia el oeste hasta afluir a una zona de Arenas En Movimiento y en cuyas aguas hay muchos peces wen-yao, que son semejantes al carpín y que, teniendo cuerpo de pez, tienen también alas de ave, de rayas verduzcas, cabeza blanca, boca roja, y que acostumbran a ir desde el Mar del Oeste hasta el Mar del Este volando en bandadas por la noche; su voz suena como el graznido de faisán y su carne es de un gusto dulce y acre; quien la come se libra de la locura; cuando aparecen, hay grandes cosechas por el mundo.
















Libro de los Montes Occidentales
en "Libro de los Montes y de los Mares - Shanhai Jing"
trad. de Yao Ning y G. García-Noblejas
ed. Miraguano (2000)


viernes, 14 de agosto de 2015

puja








   Dos bebés gigantes, profundamente embotados en una puja adormecida, se mantienen inmóviles.
   Lento combate que dura años.
   Uno rechaza la cabeza del otro con una mano poderosa y vacilante a la vez, que se apoya continuamente sobre la fontanela anterior y hunde su huella en el hueco dócil del cráneo gigantesco y blando, bajo el cual un cerebro reflexiona, laboriosamente sin duda, en una remota respuesta. 
   Y todo flota en el agua de un plácido y poco profundo pantano.



 

*





 Deux bébés géants, engourdis à l'extrême, d'une poigne endormie, se tiennent immobilisés.
   Combat lens qui dure des ans. 
   L'un repousse la tête de l'autre d'une main puissante et hésitante à la fois, qui s'appuyant continûment sur la fontanelle antérieur enfonce son empreinte dans le creux souple du crâne gigantesque et mou, sous lequel un cerveau réfléchit sans doute laborieusement à une riposte éloignée .
   Et le tout nage dans l'eau d'un doux et peu profond marais.













Henri Michaux (1899-1984)
en "Antología Poética 1927-1986"
trad. Silvio Mattoni
ed. Adriana Hidalgo (2014)



jueves, 13 de agosto de 2015

moral












La moral cedía el paso a la voluntad, 
y la voluntad se inclinaba ante la locura.
























J.G. Ballard (1930-2009)
"Bienvenidos a Metro-centre"
trad. Marcial Souto
ed. Minotauro (2008)


miércoles, 12 de agosto de 2015

niñez









Cuando muere la niñez, sus cadáveres son llamados adultos y entran en la sociedad, uno de los nombres más corteses del infierno. Es por eso que tememos a los niños, aún si los amamos, ellos nos muestran el estado de nuestro deterioro.





When childhood dies, its corpses are called adults and they enter society, one of the politer names of hell. That is why we dread children, even if we love them, they show us the state of our decay. 






Brian Aldiss
citado en Amateur Enterprises
http://www.amateur.org.uk/

trad. Ricardo Messina


martes, 11 de agosto de 2015

oneiros X







Un barquero de Tianjin soñó una noche que se le aparecía un hombre y le decía:
   –Dentro de poco vendrá un viajero cargado de cestas de bambú a requerir tus servicios como barquero. Pídele por el lanchaje mil onzas de plata. Si no te las da, no lo transportes.
   El barquero no hizo caso del sueño. Pero al poco tiempo soñó que aparecían dibujados en la pared tres signos y una voz le decía: 
   –Si se muestra avaro con el precio, dibújale estos tres signos.
   Al despertarse, el barquero se quedó atónito: en la pared estaban dibujados los tres signos con que había soñado. Pero no logró descifrar su significado por más esfuerzos que hizo. 
   Al día siguiente el sol ya estaba por ponerse cuando se acercó un hombre montado en un burro. Transportaba un cargamento de cestas de bambú y le preguntó el precio que le cobraría por utilizar sus servicios. El barquero le dio el precio que le habían dicho en sueños y el hombre se rió. Después de mucho porfiar, y como el hombre no aceptara el precio, el barquero dibujó los caracteres que había visto escritos en la pared. El hombre se quedó lívido y desapareció al instante. Al mirar dentro de los cestos, el barquero vio que éstos contenían millares de ataúdes minúsculos, del tamaño de un dedo. Dentro de ellos sólo había unas gotas de sangre. 
   El barquero preguntó el significado de los signos a mucha gente, pero nadie supo contestarle. Al poco tiempo estalló la sublevación de Wu y los insurrectos murieron a millares. Sus cadáveres llegaron a ser tantos como los ataúdes minúsculos que había dentro de los cestos.
   Esta historia me la contó Tu Baishan.




















Pu Songling (1640-1715)
"Ataúdes minúsculos"
en "Cuentos de Liao Zhai"
trad. Laura A. Rovetta y Laureano Ramírez
ed. Alianza (1985)



lunes, 10 de agosto de 2015

destierro












dieron
la vuelta en la esquina

apenas llegaron al árbol

bajó la cabeza
se tapó la cara con las manos

lloró
muy quieta

enjugó sus ojos
se limpió las rodillas
volvió a empujar 
el carrito de cartones
vacío



a dos pasos 
en silencio
una niña 
la miraba








este es princesa el destierro




















Ricardo Messina
de "Napa" (2002)


domingo, 9 de agosto de 2015

el enemigo










No es seguro que el enemigo exista realmente. [...] 
Lo indispensable para la guerra, la causa de la guerra, no es el enemigo sino la imaginación.




















James Hillman
"A terrible love of war"
citado por Luigi Zoja
en "Paranoia - La locura que hace la historia"
trad. Maria Julia de Ruschi
ed. Fondo de Cultura Económica (2013)


sábado, 8 de agosto de 2015

heridas








Si hubiera alguien sin heridas en este mundo, viviría sin deseo.






If there were any unwounded in this world, they would live without desire.



















John Berger
"Esa belleza"
trad. Jaime Priede
ed. Bartleby (2010)


viernes, 7 de agosto de 2015

instrumentos









–Los instrumentos musicales son cuerpos ajenos al espacio –dijo el padre. Estaban bajo la cúpula de la Salle Liszt. La orquesta llevaba interpretada la mitad del quinto Concierto de Brandemburgo.
–¿Como Dios? –dijo Amelia.
–No, como Dios no; son mucho más hermosos y existían antes de que inventaran a Dios. Son como conos y esferas y triángulos y rectángulos. Siempre han estado ahí; no fueron inventados, fueron descubiertos. Son como las estrellas y los planetas.













Leonora Carrington (1917-2011)
fragmento de "El pequeño Francis"
en "Memorias de abajo"
trad. Francisco Torres Oliver
ed. Siruela (2001)



jueves, 6 de agosto de 2015

personajes












PERSONAJES





VIGÍA.
CORO compuesto por ancianos argivos.
MENSAJERO.
CLITEMESTRA.
HERALDO.
AGAMENÓN.
CASANDRA.
EGISTO.







   La escena representa el palacio de los Atridas, ante cuya fachada hay unos altares con estatuas de dioses. Sobre la azotea hay un vigía tendido, con los codos apoyados en el suelo y la cabeza entre las manos. Es de noche.


















Esquilo (525-456 a.C.))
"Agamenón"
en "Tragedias"
trad. B. Perea
ed. Gredos/RBA (2006)